- ALBUM FOTOGRAFICO A MODO DE CAJA DE MUSICA -
Imagínense la situación. Tarde de invierno al calor de una estufa de butano. Los deberes hechos. La programación infantil de la televisión brilla por su ausencia – recuerdo que de lunes a jueves, los horarios televisivos no eran los de ahora. Antes había más “carta de ajuste” –… El marco incomparable, y tantas veces visto en el cine, para sentarse en el tresillo y rememorar y evocar recuerdos a golpe de álbum de fotografías.
Un álbum de fotografías del ayer es como las melodías de las cajas de música. Cargado de nostalgia y buenos momentos. Tal vez por eso, nos estremecemos de igual manera al tener entre las manos aquellas fotografías ya amarillentas de nuestros ancestros, que al evocar, gracias a la música, aquella melodía que formó parte de nuestra vida al escucharla en algún momento crucial de la misma – recuerdo con ternura aquella góndola que tenía mi madre, a la que dábamos cuerda para deleitarnos con aquella musiquilla que poníamos a todas horas… –.
Pues eso. “Melodías para Semana Santa” es también un enorme álbum de fotografías. Y también una caja de música. Una combinación ideal de sentimiento y nostalgia como sólo se puede disfrutar y saborear, además de en las grandes películas del cine de siempre, en esa otra gran película de recuerdos que se titula “vida”.
Ahora, gracias a este capítulo, podemos volver a acomodarnos en el tresillo después de haber encendido la estufa, y dejar que nuestro corazón se exprese con algún latido especial.
Diez fotografías. Diez recuerdos. Diez melodías.
Un álbum de fotografías del ayer es como las melodías de las cajas de música. Cargado de nostalgia y buenos momentos. Tal vez por eso, nos estremecemos de igual manera al tener entre las manos aquellas fotografías ya amarillentas de nuestros ancestros, que al evocar, gracias a la música, aquella melodía que formó parte de nuestra vida al escucharla en algún momento crucial de la misma – recuerdo con ternura aquella góndola que tenía mi madre, a la que dábamos cuerda para deleitarnos con aquella musiquilla que poníamos a todas horas… –.
Pues eso. “Melodías para Semana Santa” es también un enorme álbum de fotografías. Y también una caja de música. Una combinación ideal de sentimiento y nostalgia como sólo se puede disfrutar y saborear, además de en las grandes películas del cine de siempre, en esa otra gran película de recuerdos que se titula “vida”.
Ahora, gracias a este capítulo, podemos volver a acomodarnos en el tresillo después de haber encendido la estufa, y dejar que nuestro corazón se exprese con algún latido especial.
Diez fotografías. Diez recuerdos. Diez melodías.
